Después de sufrir un accidente automovilístico, los gastos pueden irse acumulando rápidamente. Sobre todo, si resultamos con lesiones que requieren de tratamientos médicos constantes e incluso de intervenciones quirúrgicas.

Por otro lado, las reparaciones de nuestro auto y/o la reposición de nuestra propiedad dañada, también representan gastos que no teníamos previstos y podemos encontrarnos en una difícil situación económica.

Es por eso que puede ser muy tentador aceptar la primera oferta de compensación que nos pueda presentar la compañía de seguros de la parte responsable. Sin embargo, hacerlo puede no ser la mejor decisión que tomemos para cuidar nuestros intereses.

Las compañías de seguros a menudo intentarán resolver la situación con el menor costo posible para sus bolsillos, por lo que sus ofertas pueden ser muy bajas y no ser lo que mereces o incluso lo que puedas necesitar.

Antes de aceptar cualquier oferta, es recomendable hablar con un abogado especializado en lesiones personales que te guíe y ayude a considerar los siguientes aspectos:

· Gastos médicos. ¿Te encuentras totalmente recuperado de las lesiones que sufriste durante el accidente? ¿Has hablado con tu médico sobre si necesitarás más tratamientos, medicamentos, o cirugías? Es importante saber cuál es el alcance de tus lesiones, y si necesitarás de más recursos económicos para cubrir otros gastos médicos en el futuro.

· Salarios perdidos. Hay lesiones que pueden impedir que regresemos a trabajar durante algún tiempo, pero también hay lesiones más severas que pueden provocar una discapacidad temporal o permanente en la persona, y, por lo tanto, el no poder regresar a trabajar, o no poder seguir realizando el mismo tipo de trabajo que tenía antes del accidente. Es importante considerar todos los salarios perdidos, y el cambio en el estilo de vida de la víctima para poder llegar a un monto de compensación que sea justo y suficiente para esta y su familia.

· Dolor y sufrimiento. Un accidente automovilístico puede tener consecuencias emocionales y psicológicas para las víctimas. Desde el estrés de la situación, hasta el dolor y sufrimiento por el que puedan atravesar debido al tipo de lesiones sufridas y sus tratamientos, hasta generar problemas como desordenes por estrés postraumático, depresión, ansiedad, y pérdida de la capacidad para poder disfrutar de la vida. Todo esto también se debe considerar al momento de establecer una compensación.

Comunícate con nosotros hoy mismo si te encuentras en una situación similar, antes de que aceptes cualquier oferta. Los abogados de la firma legal Vaziri defenderemos tus derechos y nos aseguraremos de que recibas la compensación que mereces.